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Epicondilitis o codo de tenista es una lesión que afecta a más personas de las que pensamos. Conoce cómo lograr identificarla y los tratamientos que se utilizan para reducir el dolor y aliviar este problema. 

El codo de tenista o epicondilitis lateral, es un tipo de lesión causada por el uso excesivo y repetitivo de los músculos del antebrazo. Afectándolos hasta ocasionar pequeñas incisiones en los tendones que unen al antebrazo con la parte exterior del codo. 

Contrario a lo que su nombre indica, este tipo de lesión no solo afecta a deportistas. Si no que puede afectar a cualquier persona que realice movimientos repetitivos de la muñeca y el brazo.

Síntomas

El principal síntoma del codo de tenista es dolor en la cara externa del codo, el cual puede extenderse hasta el antebrazo y la muñeca. Este dolor puede empeorar al realizar tareas diarias como agarrar objetos, girar la muñeca y apretar o estirar el brazo. En algunos casos también sé puede presentar debilidad en el antebrazo o pérdida de fuerza.

Diagnóstico

Si experimentas alguno de estos síntomas es importante visitar a un especialista para tener un diagnóstico preciso. 

El diagnóstico comenzará con la revisión de tu historial médico y un examen físico. Durante el cual se evaluará la sensibilidad, fuerza de agarre, movilidad y la presencia de signos de inflamación o hinchazón en el área. En ocasiones puede ser necesario realizar radiografías o una resonancia magnética para descartar otras posibles causas del problema. 

Tratamientos no quirúrgicos

Entre el 80% y 95% de los pacientes que sufren esta lesión, se recuperan con un tratamiento no quirúrgico, entre los que se encuentran: 

  • Reposo: Descansar el brazo afectado y evitar actividades que causen dolor, es fundamental para comenzar tu recuperación. 
  • Terapia física: Los fisioterapeutas tienen un papel crucial en el tratamiento del codo de tenista. Durante la terapia aplicarán técnicas como masajes, estiramientos y ejercicios para fortalecer los músculos del antebrazo.  
  • Soportes o férulas: Contar con un soporte en la zona afectada puede ayudar a aliviar la tensión de los músculos y acelerar la recuperación. 
  • Ejercicios en casa: Es recomendable solicitar a tu fisioterapeuta que te proporcione ejercicios de estiramiento, que ayuden a mantener la flexibilidad y fuerza del codo.

Tratamientos quirúrgicos

Si los síntomas no disminuyen después de 6 a 12 semanas de tratamiento, es posible que tu especialista recomiende una cirugía. 

El tipo de cirugía a realizar dependerá de diversos factores, como la gravedad de la lesión, salud general y necesidades del paciente. No olvides consultar con tu médico sobre las opciones disponibles y los riesgos de cada tratamiento antes de tomar una decisión.

Si presentas dolor en el codo o algún otro síntoma en Rehabilitamedic podemos ayudarte. Consulta con nuestros expertos en fisioterapia para obtener el diagnóstico y tratamiento adecuado para tu lesión. ¡Recupera tu bienestar hoy!